Los
celos, ese sentimiento que tanto nos cuesta aceptar a niños y a mayores.
Emoción que es difícil de controlar y en ocasiones no sabemos cómo manejar.
Los
celos son una sensación de no ser correspondidos emocionalmente por alguien al
que queremos, al menos es nuestra percepción, de que no nos corresponden con la
intensidad o frecuencia que deseamos. Los celos acaban siendo motivo de
frustración personal, enfados o malentendidos con las personas queridas.
Aunque
los celos pueden manifestarse tanto en adultos como en peques, hoy nos vamos a
centrar a hablar de los celos entre hermanos, ya que últimamente, hemos
recibido muchas consultas sobre este tema. Otro día os hablaremos de celos en
pareja.
¡Oh no, no digas eso! Este niño
necesita un cariño especial, Merche. No olvides que hasta hace un año era el
rey de la casa. Es el príncipe destronado ¿oyes? Ayer todo era para él; hoy,
nada. Es muy duro mujer”
(El príncipe destronado, Moguel Delibes, 1974)
Según
Juan Manuel Ortigosa, “los celos son una
reacción adaptativa transitoria del niño, formada por una alteración emocional
y comportamental con respuesta a un desequilibrio en la dinámica afectiva
familiar hasta ese momento establecida, a consecuencia del nacimiento de un
nuevo hermano, y que, en algunos casos puede adquirir carácter permanente”.
El
hecho de tener a un nuevo hermano supone
muchas alegrías pero también algunos inconvenientes.
Es importante saber cómo y
cuándo darle la noticia y del momento de las “presentaciones”. Por mucho que
nuestro hijo “nos haya pedido” un hermanito y tenga muchas ganas de tener un
compañero con el que jugar, tarde o temprano su presencia en casa puede ser “un
estorbo”.
Nuestro
hijo va a notar cambios incluso antes de que nazca.
Durante el embarazo mamá
está cansada, no tiene tiempo para jugar, hay cosas que se dejan de hacer, papá
está más pendiente de ella o preparando las cosas que se van a necesitar.
Durante el parto mamá y papá van a
“desparecer” unos días en los que el niño está “descolocado”. Aunque hayamos
dejado todo bien atado y cubiertas sus necesidades con algún familiar, siempre…
faltarán papá y mamá.
La
llegada a casa… ¿Qué os voy a contar de
la llegada con el nuevo bebe? Pues que en cada familia es un mundo. Hemos
oído cientos de historias, muchas de ellas con anécdotas muy divertidas pero
todas diferentes.
¿Os animáis a contarnos la vuestra?
LA
VISITA A LA CLÍNICA.
Muchos
de vosotros nos habéis preguntado si es recomendable que el hermano mayor acuda
a conocer al bebe al hospital y la respuesta es… SIIIII, (siempre y cuando sea
posible).
Para
hacerle más fácil esta situación familiar podéis hacer que este primer
encuentro con su hermano sea también especial para él.
Aquí os dejamos unos
consejos. ¡Tomad nota!:
- Cuando vayáis camino del hospital explicarle que su hermanito ya está aquí, que ahora no va a poder jugar con él porque es muy pequeño y solo sabe llorar, comer y dormir pero que pronto podrán jugar y divertirse juntos. para muchos de ellos el verlo tan pequeño y no poder hacer nada, no es lo que esperaban.
- Cuando llegue al hospital, procurad que en la habitación no haya mucha gente, a ser posible que esté la mamá y el bebe, ya que si no para él será demasiada expectación.
- Intentad que cuando entre en la habitación el bebe esté en la cuna, así la mamá podrá abrazarlo y dedicar sus mimos al mayor, mientras que el papá podrá acercarle a la cuna.
- A estas edades tempranas lo que más les gusta a los peques son los regalos, pues bien, su nuevo hermano sabe que lo que más le gusta es… (coche, muñeca, pelota…) y se lo ha traído.
- La visita no debe prolongarse mucho, ya ha conocido a su hermanito, ha visto a mamá y ahora llega el momento de irse a casa y esperarles allí.
CONSEJOS
PARA MANEJAR Y REDUCIR LOS CELOS
- Dedicarle un rato al día de exclusividad, haced algo juntos que sea especial para él.
- No hacerle mayor de la noche a la mañana, no es bueno exigirle más de lo que se le exigía antes de que llegara el bebe ni tampoco otorgarles responsabilidades en exceso.
- Intentar mantener sus rutinas.
- Respetar sus espacios y sus juguetes, no llenarle su cuarto de repente, de “cosas de bebe”.
- No llenar la casa de fotos del bebe.
- No hacerle de menos cuando vengan visitas a conocer al nuevo integrante en la familia.
- Evitar comparaciones. Aunque sea un bebe muchas veces nos salen frases del tipo “come más rápido que tú”, “mira qué bueno que es que duerme y no protesta tanto como tú”...
- Si empieza a retroceder en algunas cosas, no reírse ni decirle que es un bebe.
¿POR
QUÉ ES GENIAL TENER UN HERMANO?
Le
tenemos que hacer entender que la llegada del nuevo bebe supondrá un cambio
para todos para mejor. Aunque los primeros meses pueden ser algo complicados en
algunas familias, pasados unos meses y “volviendo a la normalidad” él
desempeñará un papel muy especial, se convertirá en hermano mayor y podrá
disfrutar de un “nuevo amigo” y
“compañero de juegos”.
A partir
de ahora las cosas serán mucho mejor:
- Será su confidente.
- Será un ejemplo a seguir por su hermano.
- Le enseñará y descubrirán juntos nuevas cosas.
- Acudir a él siempre que lo necesite.
- Compartirán y así disfrutarán de más cosas los dos.
- Será su héroe.
- Jugará con alguien y realizará tareas que antes solo no podía.
- Será su compañero de andaduras.
- Cuando esté triste o enfadado, buscará consuelo en su hermano.
- Se comportará como su protector y "héroe"
Esperemos
haberos dados algunos consejos prácticos.
Aquí va el más importante…
¡¡DISFRUTAD DE VUESTRA FAMILIA Y DE AQUELLOS
MOMENTOS QUE PROTAGONICÉIS!!
Nos
vemos en próximos artículos.
Imágenes
protagonizadas por nosotras.
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